La importancia de saber utilizar las
Nuevas Tecnologías de la
Información
Con las
tan cacareadas y famosas Nuevas Tecnologías de la Información, las TIC´s, hemos
asistido perplejos a una revolución en nuestras vidas, que inevitablemente nos
ha obligado a afrontar un ritmo imparable de conocimiento y de aprendizaje. Todo
llega tan deprisa que apenas tenemos tiempo de digerirlo, de asimilarlo, de
afrontar el reto con otras costumbres o rutinas desde el punto de vista de la
docencia.
El Dr.
Bruno Ollivier (investigador Francés y catedrático en el Instituto
Latinoamericano de la Comunicación Educativa) ha destacado en numerosas
ocasiones que los cambios que ha experimentado la sociedad, con la invasión de
las nuevas tecnologías de la información y comunicación, no sólo en el campo
educativo sino en el quehacer humano en general, hace unas décadas era
inconcebible, o quizás sólo imaginado en mentes ingeniosas de escritores de
ciencia-ficción.
Como se
puede comprobar cada día, los nuevos cambios tecnológicos, como es el caso de
Internet, han transformado obligatoriamente la vida de los seres humanos. Por
ejemplo, labores en las que antes eran necesarias más de cuatro personas, hoy se
han convertido en quehaceres en los que una sola persona manejando un ordenador
es más que suficiente. La tecnología avanza a un ritmo imparable y los seres
humanos estamos obligados a seguir los cambios al instante, si queremos seguir
los pasos agigantados de la sociedad en la que vivimos.
Pero la gran pregunta tiene que ver con la perspectiva que arrastra este nuevo fenómeno o conjunto de coyunturas o circunstancias: ¿esto es positivo o negativo? En nuestra modesta opinión, creemos que positivamente hemos avanzado, sí, ciertamente, mas en muchos campos hemos retrocedido negativamente. Las Nuevas Tecnologías aplicadas al campo de la educación, por ejemplo, han conseguido que el interés que despierta en el estudiante un libro vaya disminuyendo.
Importancia de la actitud que
tomemos
Hoy en
día, la búsqueda de información se consigue en tan solo unos minutos, con sólo
teclear una palabra en el teclado de un ordenador. Ello podríamos afirmar que es
positivo, pero ¿dónde nos llevarán estos avances? El impacto que esto ha
originado entre los jóvenes, indudablemente, ha sido beneficioso. Sin embargo,
sólo el futuro que está por llegar nos desvelará esos y otros interrogantes
acerca de lo que es positivo o negativo para la sociedad. La experiencia nos
indica que, ante cualquier hallazgo o descubrimiento, lo que vale es la actitud
que despierta y no sus potenciales valores intrínsecos.
En todo
caso, debemos conocer los alcances reales de las Tecnologías de la Información y
de la Comunicación. El Dr. Ollivier menciona que “saber buscar la información
supone saber investigar en bibliotecas o en centros de documentación”. No
debemos fiarnos de la información atractiva que se nos presenta en las páginas
Web, no sin contrastarla previamente. Hemos de inculcar generación tras
generación que tan importante es saber buscar una información a través de la red
como saber encontrarla en una biblioteca.
Es el
olfato lo que vale, el deseo de aprender, la anhelo de despejar dudas. No
debemos permitir que se pierda la esencia de cada uno de los avances que han
llegado o que están por llegar. El mundo está abierto, lleno de beneficios, pero
de nosotros pende el hilo de su aprovechamiento cierto y
real.
Meritxell Jover García y Juan Tomás Frutos.